El mirto del siguiente artículo fue adquirido en
septiembre del año 2010, en la exposición de Giareda en Italia. Como es
costumbre en esa exposición montan muchos profesionales stand de venta. Entre
todos los mirtos que vi, este me llamo mucho la atención, por su base amplia de
buenas raíces y conicidad, además de su madera muerta.
El mirto, del latin myrtus, o arrayán (del árabe
al-rayhan o rihan, el aromático ) pertenece a la familia de las myrtaceas .En
la antigua Grecia se premiaba a los héroes olímpicos con una corona de mirto y
este arbusto era símbolo del amor y la belleza, por lo que estaba consagrado a
Venus.
Nativo del sudeste de Europa y norte de África, son
arbustos perennes de hasta 3-4 metros de altura, pero por lo general no suele
sobrepasar los 2 metros, densos muy ramificados, con corteza rugosa, con
fisuras y amarillento rojiza. En las regiones mediterráneas aparece en solanas
secas y bosques de pinos, encinares y alcornocales, en suelos frescos y algo
húmedos (vaguadas), más bien ácidos, fértiles y bien drenados.
Sus hojas nacen de 2 en 2, enfrentadas, coriáceas,
relucientes, ovaladas y lanceoladas, agudas y opuestas. Cuando son movidas
producen una sustancia sumamente aromática, por lo que ha sido especialmente
usado en perfumería.
Sus flores, solitarias sobre largos pedúnculos, son
blancas, de 2-3 cms. de diámetro y con numerosos estambres que nacen en las
axilas de las hojas. El fruto es una baya de 1 cm. de color azul oscuro, contiene
numerosas semillas y es comestible. Maduran en octubre.
El mirto constituye una especie muy adecuada para
bonsái en clima mediterráneo, por el
tamaño de sus hojas, su floración y fructificación, su buena respuesta para rebrotar después de podas fuertes, su
rápido crecimiento y su capacidad de mantener madera muerta. Soporta bien podas y pinzados,
su corteza anaranjada y rugosa nos trasmite un sentimiento de vejez ideal, y
además, su madera muerta tanto en oquedades, en zonas lisas (shari) y ramas
secas (jin) es suficientemente dura y bella para trabajarla tanto a mano como
con máquina eléctrica.
En noviembre de 2010 y durante una charla
demostración en la Asociación Amigos del Bonsái en Benalmádena, se le realizó un
primer trabajo de modelado. Antes de dicho trabajo se abonó generosamente para
preparar a la planta a soportar todas las intervenciones que se le realizaron.
Se eliminaron todas las ramas que no íbamos a
utilizar para su diseño. Según avanzaba la limpieza de ramitas se podía ver la
silueta del tronco, además de su madera muerta en la zona alta del tronco.
Una vez seleccionadas todas las ramas que nos
servirían para el diseño se comenzó a alambrar, tarea que nos llevó un buen
rato.
Se posicionaron todas sus ramas, quedando en este
primer modelado las bases de futuro.
La maceta en la que estaba plantado era suficientemente grande, la mezcla del
sustrato muy buena, por lo tanto se dejó varios años sin trasplantar.
En la primavera de 2013 se trasplantó a una maceta
antigua japonesa de color crema, color
que realza mucho a esta especie. Respondió perfectamente y la mezcla utilizada
fue un 80% de akadama de grano medio y un 20% de pomice.
Se abonó generosamente durante ese año para que
recuperase el vigor, a la vez que se mantenía el diseño.
En septiembre de 2014 y después de cuatro años de
trabajo, la planta va adquiriendo mochikomi, os muestro los resultados en la fotografía que
fue tomada justamente después del último trabajo.
Altura 55 cms.
Maceta shiwatari.
---------------------------------------oOo----------------------------------------